Tras la profunda investigación de la Asociación Deportiva de Fútbol Profesional del Perú (ADFP) se conoció la severa sanción de la Comisión de Justicia de la Segunda División contra tres jugadores de la categoría que están acusados de arreglar partidos.

El castigo más duro cayó para Fischer Guevara, portero de 38 años del Sport Coopsol, y Lee Andonaire, defensor de 37 años de Sport Loreto, quienes quedarán excluidos de toda actividad relacionada con el fútbol por un periodo de cinco años.

El caso escandaliza al fútbol peruano porque uno de los clubes implicados es Universidad César Vallejo, propiedad del polémico ex candidato presidencial César Acuña. Lo llamativo, es que han sancionado de forma ejemplar a los jugadores presuntamente involucrados, pero no a los clubes. Y tras quedar empatados en puntos César Vallejo y Sport Boys, jugarían este domingo en el estadio Garcilaso de la Vega del Cusco para definir el ascenso.

Otra de las insólitas medidas de la Comisión de Justicia de la Segunda División fue sancionar a Ryan Salazar (Unión Huaral) con dos años fuera de cualquier actividad relacionada con el fútbol. Es un fallo polémico porque se trata del jugador que denunció todo. Salazar presentó un audio con una oferta para que su equipo se dejara ganar en el partido que Vallejo finalmente ganó de visita por 4-0.

Además, se filtraron unas imágenes de Fisher Guevara junto a César Acuña Acuña y unos billetes, que dijeron que formaban parte de «un préstamo».

Los últimos encuentros del club Universidad César Vallejo han dejado dudas por errores arbitrales y otros hechos «sospechosos». Aunque las autoridades han emitido las sanciones, aún hay más denuncias y cuestiones por resolver.