Apenas 103.000 kilómetros cuadrados de superficie. Sólo 331.811 habitantes, según el censo de 2016. Pero con su pasaje a Rusia 2018 asegurado. Islandia lo hizo de nuevo. Venció 2-0 a Kosovo y se quedó con el Grupo I de las Eliminatorias europeas, postergando a combinados más poderosos como Croacia (jugará el repechaje) y a Ucrania. Así, también se prepara para la foto en el Libro Guinness de los Récords: se transformó en la selección con menor cantidad de habitantes en lograr una plaza para la cita mundialista. Es más: nunca un representante de un país con menos de 1.000.000 de habitantes había jugado un Mundial.

Gylfi Sigurdsson, la figura del equipo (juega en el Everton de Inglaterra) y Johann Berg Gudmundsson anotaron los goles del elenco islandés, que volvió a escribir una página histórica. En la Eurocopa 2016 ya había revolucionado el mundo del fútbol al superar la fase de grupos (empate ante la Portugal de Cristiano Ronaldo incluido) y dar el golpe en octavos de final eliminando nada menos que a Inglaterra. Luego, en cuartos de final cayó frente a Francia, pero ya había dejado su huella con el canto de «guerra» que emana de sus tribunas cada vez que los Vikingos salen a la cancha. Ya sin Eidur Gudjohnsen, su goleador histórico, ex compañero de Lionel Messi en Barcelona, pero con una estructura cimentada hace 15 años (cuando la Federación tomó la decisión de realizar una importante inversión en infraestructura) que lo condujo a celebrar una nueva sorpresa: en 2010, por caso, figuraba en el puesto 112 del Ranking FIFA: hoy ostenta su plaza para Rusia desde el escalón 22.

Una hazaña que mantiene su contexto de cuento, como ocurrió en la Eurocopa: Heimir Hallgrimsson continúa siendo el entrenador, aunque part time: es dentista de profesión. La lista de futbolistas profesionales registrados en la isla apenas supera la centena y el resto es amateur y mezcla la pasión por el fútbol con sus ocupaciones. Pero detrás conservan el apoyo de toda población, que ayer volvió a inundar las calles de Reykjavik para celebrar el hito, como si el alpinismo o el handball no fueran sus deportes de cabecera. Islandia es Mundial. Y tal vez ya dejó de ser sorpresa…

VALOR DE MERCADO

La clasificación de la FIFA coloca a los vikingos en la 22ª posición, por delante de Ucrania (24) y Turquía (27) pero por detrás de Croacia (18). En 2015, antes de concluir la fase de clasificación para la Eurocopa, Islandia ocupaba la 36ª plaza, por detrás de las tres selecciones a las que ahora dejó por el camino en la ruta hacia el Mundial de Rusia.

Y lo hizo con un equipo cuyo valor financiero de acuerdo a los parámetros del portal especializado transfermarkt es muy inferior al de las contrincantes a las que superó. El once inicial que Islandia presentó en la última jornada ante Kosovo tenía un valor total de 44,1 millones de euros… y contando con que Gylfi Sigurdsson, mediapunta del Everton, ya vale por si solo 25 millones, casi un 57 por ciento del total.

Rakitic, valorado en 45 millones de euros, tiene un precio superior al de toda la alineación islandesa, cuyo portero, Hannes Thor Halldorsson que defiende la meta del Randers de Dinamarca, apenas es valorado en 300.000 euros. Ninguno de los futbolistas que utilizó Heimir Hallgrimsson frente a Kosovo juega en la Liga local y ninguno de ellos, excepto Sigurdsson, (por quien el Everton pagó cerca de 50 millones de euros) alcanza un precio de 5 millones.

Ese equipo que en junio de 2016 dio el campanazo eliminando a Inglaterra en la Eurocopa vale menos que los cuatro futbolistas más valorados de Ucrania (Yarmolenko, Konoplyanka, Marlos y Stepanenko suman 47 millones), Turquía (Arda Turan, Ozyakup, Tosun y Soyuncu suman 45) y apenas completa un tercio que valen (135) el poker de cracks croatas (Rakitic, Modric, Perisic y Mandzkic).

Esta es la alineación islandesa, con su valor en millones de euros

  • Halldorsson 0,4
  • Saevarsson 0,5
  • Sigurdsson 4,5
  • Arnason 0,4
  • Magnusson 1,8
  • Gunnarsson 2,5
  • Hallfredsson 1,5
  • Gudmundsson 2,5
  • Sigurdsson 25,0
  • Bjarnason 2,0
  • Bodvarsson 3,0