El mundo del fútbol sorprende a todos día a día. Esta vez ocurrió un hecho inusitado, pero a la vez es una imagen que atrasa más de 40 años.

En el partido por el tercer puesto de los SEA Games (los Juegos del Sudeste Asiático), en un tiro libre, un jugador de la selección de Indonesia corrió hacia la pelota, amagó y retrocedió sin pegarle. Aunque lo llamativo es que Nan Wai Min, lateral de Myanmar (país asiático), entendió que la pelota estaba en juego y corrió hacia ella para pegarle. En el estadio todos se sorprendieron y el árbitro le explicó la regla a Min, que volvió a la barrera con su compañero. Finalmente, Indonesia se quedó con el bronce tras ganarle 3-1 al equipo del pibe que desconocía el reglamento…

Un hecho idéntico sucedió en el Mundial 1974 en Alemania, cuando Joseph Mwepu Ilunga, futbolista de Zaire pateó el tiro libre de Brasil antes de que los propios brasileños lo ejecuten, y por eso fue amonestado.