El escándalo que ha resonado en España acerca de las detenciones de varios altos cargos de la Federación de Fútbol de ese país también tendría su eco por estas tierras.

Ángel María Villar (presidente) y su hijo Gorka (ex director general de la Conmebol) han sido detenidos por la Guardia Civil en el marco de la ‘Operación Soule’ donde les han imputado de varios delitos.

Una de las cosas que se ha mencionado en los principales diarios españoles es acerca de la sospechosa actividad de empresas al mando de Gorka Villar con respecto a varios partidos de la Selección española luego de que esta se coronara campeón del mundo en 2010.

Dentro de todo esto se encuentran en la mira de las autoridades de ese país los amistosos que hizo España en varios países de Sudamérica entre 2011 y 2013 donde también visitaron Guayaquil (15 de agosto de ese año) para medirse a la Tricolor.

Diarios como El País y AS apuntan específicamente a que las autoridades están buscando cualquier indicio de delito sobre estos partidos tal como vemos en los siguientes extractos de sus publicaciones:

«También se han investigado algunos amistosos disputados por la selección española por debajo de su caché frente a los países de federaciones que son clientes de un negocio que en los últimos años ha incrementado su facturación. Selecciones de la confederación suramericana, Conmebol, y Corea del Sur, con la que se han disputado varios amistosos en los últimos años, estarían entre las elegidas para desviar manera directa o indirecta los fondos de los encuentros disputados de manera en beneficio del despacho del hijo de Villar» (Diario El País en el artículo: «Gorka, el hijo de Villar, un vástago con poder e influencias»).

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«En sólo tres años, entre 2010 y 2013, España jugó diez amistosos repartidos entre México, Argentina, Venezuela, Costa Rica, Puerto Rico, Panamá, Ecuador y Estados Unidos, donde acudió en tres ocasiones. Desde entonces y hasta hoy, La Roja no ha vuelto a cruzar el Atlántico. La UCO (Unidad Central Operativa de la Guardia Civil Española) investiga si los Villar se beneficiaron de esos partidos amistosos y si el presidente de la Federación facturó cantidades que acabaron en Sport Advisers, la consultoría de su hijo Gorka. Esta empresa pasó en ese período de ganar algo más de doscientos cincuenta mil euros a casi novecientos mil. El procedimiento: La Guardia Civil sostiene que Ángel Villar “pudo haber impulsado la celebración de partidos entre España y otras selecciones consiguiendo así contraprestaciones para la contratación de servicios y otras relaciones comerciales en beneficio de su hijo Gorka, abogado especialista en derecho deportivo, detenido igualmente en la operación». (Diario AS en el artículo: «Gorka Villar facturó un 252% más por 10 partidos de España»).