La inminente llegada del belga Romelu Lukaku al Manchester United ha abierto la puerta de par en par para permitir la salida de Wayne Rooney. El delantero había perdido continuidad con el arribo de José Mourinho a la dirección técnica del club más ganador de la Premier League y este nuevo refuerzo cierra sus posibilidades de ganarse un lugar en el equipo titular.

Lejos de irse de Inglaterra, el destino del punta de 31 años estaría en una institución que él ya conoce. Según señala la prensa británica, el Everton ya se contactó con el futbolista, que justamente debutó en la institución en la temporada 2002/03.

El detalle es que Rooney llegaría gratis al club que lo vio nacer. Debido al cariño y el respeto que el delantero se ganó, el United le pediría la rescisión del contrato sin dinero de por medio para que pueda llegar como agente libre a su nuevo equipo.

En 13 años con la camiseta roja, el atacante inglés ganó 16 títulos y marcó 253 goles, convirtiéndose en un ídolo del público y en un referente dentro del vestuario.