El Aurinegro falló en su intento de revertir el 0-1 con el que se volvió de Paraguay. En San Cristóbal empató sin goles y rápidamente se despidió del certamen.
La diferencia lucía estrecha y la ambición de Deportivo Táchira crecía al saber que definía la revancha frente a Deportivo Capiatá en condición de local. Sin embargo, el Aurinegro careció de efectividad, se topó con un rival que no se intimidó y se le plantó, por lo que la igualdad 0-0 lo dejó afuera, apenas en la Fase 1 de la Copa Libertadores.
El conjunto paraguayo llegó a dominar y a llegar con riesgo y es por eso que el arquero Contreras sobresalió por sobre el resto de sus compañeros. Debió salvar una y otra vez el arco del cuadro venezolano, que no pudo ante el orden y la prolijidad del visitante.
Pérez Greco y Pedro Ramírez intentaron llevar peligro al arco adversario, pero faltó profundidad y prácticamente no lograron inquietarlo. Gamarra e Irrazábal buscaron el quiebre del marcador, aunque tampoco capitalizaron sus llegadas; de todos modos, la urgencia estaba del lado local, que fue con desesperación en los últimos minutos y sólo halló frustración.
Táchira, que llegó a octavos de final en la edición 2016, se despide rápidamente de la competencia internacional, mientras que Capiatá se abre paso para medirse con Universitario del Perú.
