Con la bronca de la derrota, con la decepción de irse a su casa a las afueras de Sevilla sin haber ganado un punto, con la primera derrota en el Sánchez Pizjuán desde que es entrenador del Sevilla… No cabía tanto cabreo en el enjuto cuerpo de Jorge Sampaoli. Y en esas, mientras se retiraba al vestuario sin mediar palabra con nadie, se encontró con el abrazo de Javier Mascherano que le apareció de dios sabe donde. Su compatriota le susurró algo cariñoso al oído. Y después llegó Neymar, que también hizo lo propio. Y más tarde, ya en el túnel de vestuarios, apareció la cara sonriente de quien le generó tanto cabreo: Leo Messi. Tres pesos pesados del equipo rindiendo tributo a un técnico que acaba de llegar a Europa y que ha cruzado el charco con la vítola de ser el tercer mejor entrenador del mundo.

EL BUEN JUEGO DE SAMPAOLI
Y es que el partido del Sánchez Pizjuán encumbró un poco más a Leo Messi a la estratosfera del fútbol pero el juego del equipo del Sevilla sirvió para poner a Jorge Sampaoli en el mapa del FC Barcelona. La afición culé descubrió a un técnico cuyo equipo juega como el Barcelona lo hacía cuando Pep Guardiola estaba en el Camp Nou. Intensidad, presión, juego ofensivo, intercambio de posiciones, riqueza táctica… argumentos que enamoró a Neymar para fichar por el Barça, valores que le permitieron a Messi demostrar quién es o a Mascherano redescubrir el fútbol tras su experiencia en Inglaterra.

VIRTUDES BLAUGRANAS
Sampaoli posee casi todas las virtudes que pide el barcelonismo a su entrenador y es un nombre que debe ser considerado como una opción de futuro en el caso de que Luis Enrique abandone el banquillo del Camp Nou a final de temporada. Solo hay una característica que haría a Sampaoli impropio de ser el sucesor de Luis Enrique y el predecesor de Xavi Hernández: No tiene pasado culé, no estaría en la línea de los 360 grados como azulgrana, esta corriente de opinión de una parte de la directiva que necesita un entrenador para ser merecedor del trono del Camp Nou.

Sin embargo, ¿es esto suficiente argumento para descartar a un técnico que tiene mejor asimilado el estilo del Barça que el propio Luis Enrique?, ¿Y que Cocu?, ¿Y que Van Bronckhorst? ¿Y que Koeman?. ¿Y que Valverde?… ¿Cuándo han visto a los pesos pesados del Barcelona felicitar al entrenador rival con tanto ímpetu como los jugadores del Barça hicieron con Sampaoli? Y es que este calvo tiene algo especial.