La famosa frase «la gloria o Devoto» esta vez se hizo realidad. De estar en la cúspide del fútbol mundial, este jugador pasó al calvario de la cárcel.

Edilson Silva Ferreira integró el plantel de Brasil que en 2002 logró su quinta Copa del Mundo en Corea-Japón, pero ahora pasa sus días en la prisión por no pagar la pensión alimenticia de sus hijos. Es la segunda vez que le ocurre, ya que también fue preso en 2014 por el mismo motivo.

Edilson fue arrestado al llegar al aeropuerto internacional de Brasilia y fue llevado al Departamento de Policía Especializada de la ciudad, en donde estará al menos un mes, plazo en el que debe pagar los 430 mil reales (alrededor de 130 mil dólares) que adeuda.

El futbolista de 44 años fue campeón del mundo con el Scratch en 2002, y dos años antes había logrado el primer Mundial de Clubes con el Corinthians, torneo en el que recibió el Balón de Oro. Además de en el Timao, el delantero paseó su fútbol por el Palmeiras y el Flamengo.