Luis Suárez, delantero uruguayo del FC Barcelona, ha desvelado en una entrevista exclusiva al diario uruguayo ‘Ovación’ que la FIFA le invitó a la Gala del Balón de Oro 2015. Una invitación que el delantero barcelonista, pichichi de la Liga española declinó, como protesta no solo por la sanción que le impuso, sino también por todo lo relacionado con las votaciones.

«Son cosas del fútbol. La FIFA me invitó a la gala del Balón de Oro con la excusa de haber sido el mejor jugador del Mundial de Clubes. No creo que hayan invitado anteriormente a ningún otro jugador que hubiese ganado ese premio. Dio la coincidencia que a mí me quisieron invitar. Era un torneo que me hacía mucha ilusión y traté de no pensar en quién lo había organizado», explicó Luis Suárez en esta entrevista.

Suárez también se mostró sorprendido por haber recibido este premio como mejor jugador del Mundial de Clubes. «Me sorprendió un poco, porque teniendo alrededor a tantos jugadores de calidad y que me elijan a mí, sorprende un poco. Pero a la vez me enorgullece, porque es el premio al trabajo, al sacrificio que vengo haciendo. Más que nada me da gusto compartirlo, porque es mérito de todo el equipo. Soy un privilegiado de haber recibido ese premio porque cuando era chico lo miraba por televisión y decía. «Mirá… ese jugador salió como el mejor». ¡Y ahora soy yo! Y lo disfruté», desveló Luis Suárez.

Luis Suárez, que quiere vestir pronto «la camiseta más hermosa del mundo», refiriendose a la de Uruguay, dice en esta entrevista sobre su regreso a la selección que «ahora vivo el día a día con el Barcelona. En los momentos de las Eliminatorias me daban muchas ansias de querer estar ya jugando, estar ahí con los compañeros. De aquí a marzo, que todavía queda, esperemos que pueda manejarlo con calma. Y, a la hora de jugar, volver a disfrutar vestir la camiseta más linda del mundo «.

El delantero uruguayo del FC Barcelona comentó sobre su hat trick ante el Athletic que «se dio la posibilidad de que en una de las primeras jugadas ellos quedaran con un hombre menos y nosotros hicimos lo necesario para tratar de aprovechar el jugador de más que teníamos. Había muchos más espacios y creamos muchas más situaciones de gol. Tanto el gol como la asistencia a uno anímicamente le ayuda; la autoestima sube».

Sobre su posición en el campo acabó diciendo que «jugando de delantero y en el mejor equipo del mundo siempre hay mucho más posibilidades de hacer goles, pero también hay que hacerlos, hay que estar ahí. A veces la gente puede opinar o decir que es sencillo, pero no es nada fácil. Me han tocado partidos donde se me presentaban situaciones de gol y las erraba.», y concluyó apuntando sobre su rol en la tripleta atacante del FC Barcelona que «la verdad que cada uno cumple su rol en el equipo. Hay que respetar la trayectoria de la persona que tienes adelante. Siempre está el respeto. Respetar que uno hace años que viene tirando los penales, como Leo; después vino Ney y es el número dos. Cuando Leo estuvo lesionado un par de partidos era Ney o yo. A mí me tocó patear un penal. Es más que nada de confianza, de que ninguno quiere ser protagonista y que el que se sienta mejor cobre la pena. Pero está claro que el número uno es Leo, tanto en los tiros libres como en los penales».