El Santos brasileño hizo pública una carta en la que acusa al Barcelona de incumplir el contrato de traspaso de Neymar al club azulgrana al negarle el pago de dos millones de euros por la nominación del jugador entre los tres finalistas al Balón de Oro. El Barcelona esgrimió en una carta que su negativa varias irregularidades como la falta de un recibo fiscal. El Santos considera esos argumentos “una cortina de humo” y amenaza con llevar al club azulgrana a los tribunales.

La postura del Barcelona se fundamenta en la demanda de arbitraje ante la FIFA que presentó el Santos reclamando una cantidad superior a los 17,5 millones que recibió del Barcelona por la operación, al considerarse única entidad legitimada para percibir dinero en concepto de un traspaso que en realidad pudo ascender a 80 millones, gran parte de los cuales acabó en manos de terceros.

El Santos asegura no haber recibido la carta del Barcelona negándole el bonus del Balón de Oro y precisa que esta cláusula es independiente de la reclamación ante la FIFA.

La comunicación del Santos es la siguiente:

“Santos Futebol Clube (“SFC”) desea responder públicamente ante sus aficionados a las preguntas suscitadas tras la reciente publicación de una supuesta carta del Fútbol Club Barcelona (“FCB”) de fecha 14 de diciembre de 2015. Los originales de dicha carta jamás fueron recibidos por el SFC y el SFC no podría estar más en desacuerdo con el contenido de la misma.

El 31 de mayo de 2013, el Santos transfirió los derechos federativos de Neymar Jr. al FCB por un precio de 17,1 millones de Euros más una prima de 2 millones de Euros en caso de que el jugador resultase finalista del premio FIFA World Player. Sin embargo, como resultado de la instrucción del denominado “Caso Neymar” contra el FCB y sus directivos ante los juzgados españoles, el SFC ha tenido noticia de que en realidad el FCB pagó por el traspaso del jugador alrededor de 80 millones de Euros. Según la información reportada por los medios de comunicación, incluso en los días que precedieron a la final del Mundial de Clubes de 2011 (cuando Neymar Jr. todavía era jugador del SFC), el FCB habría pagado cantidades al jugador por su traspaso.

A la luz de lo anterior y puesto que el SFC era el único con derecho a percibir cantidades por el traspaso de los derechos del jugador, SFC interpuso una demanda de arbitraje ante la FIFA para reclamar una indemnización equivalente a la diferencia entre los 17,1 millones de Euros recibidos y el resto de las cantidades pagadas por el FCB a terceros en relación con el traspaso del jugador. En el caso de que la FIFA concluya que las conductas del FCB, sus directivos y del jugador conllevan violaciones a los reglamentos de la FIFA, la FIFA podrá imponerles sanciones. Sin embargo, esta decisión compete únicamente a la FIFA y el SFC no tiene manera de interferir en la misma.

El SFC pide respeto a la confidencialidad que impera sobre el procedimiento de arbitraje de la FIFA e insta a las partes involucradas en el mismo para que se abstengan de violar dicha obligación de confidencialidad.

Por otro lado, en otro claro ejemplo de incumplimiento contractual, parece que el FCB dice en su carta que no efectuará el pago debido al SFC por la nominación de Neymar Jr. como finalista del premio FIFA World Player. Los impedimentos formales supuestamente aludidos por el FCB para que se realice el pago en realidad no existen. Por consiguiente, el FCB estaría utilizando meras cortinas de humo para intentar evadir sus obligaciones contractuales. No debe olvidarse que es precisamente el FCB el que está siendo objeto de investigaciones criminales y fiscales en España, por lo que únicamente el FCB debe someterse a auditorías y verificaciones de sus facturas.

Tan pronto reciba oficialmente la correspondencia de FCB, el SFC enviará una debida respuesta a la misma. SFC se reserva el derecho a iniciar cuantas acciones legales sean necesarias para preservar sus derechos y, asimismo, para cobrar todas las cantidades que le sean adeudadas”.