El primer tiempo entre Barcelona y Guangzhou Evergrande por las semifinales del Mundial de Clubes dejó dos imágenes. La primera, el gol de Luis Suárez a los 38 minutos del primer tiempo. La segunda, una desgraciada lesión del futbolista Zou Zheng, defensor del equipo chino.

Iban casi 35 minutos y el partido aún estaba igualado en cero. El elenco chino, dirigido por Luiz Felipe Scolari, intentaba defenderse de un ataque del Barcelona. Dani Alves ganó de arriba entre dos rivales, entre los que se encontraba Zheng. La jugada se diluyó, pero la imagen que siguió fue escalofriante: Zheng cayó al piso y con su propio movimiento arrastró su pierna izquierda, que no resistió el peso y terminó por romperse: fractura de tibia y peroné.

Sin dudar, compañeros y rivales se colocaron en torno al defensor, que permanecpia inmóvil en el piso. Suárez rápidamente advirtió la gravedad de la situación y comenzó a llamar a los médicos con los brazos. Zheng se retiró en la camilla y en su lugar ingresó Li Xuepeng para continuar en el segundo tiempo.

Ahora deberá enfrentar una extensa recuperación para retornar a las canchas en la Superliga China. El defensor de 27 años nació en la provincia china de Shandong y comenzó su carrera en el club Qingdao Jonoon, y a fines de 2014 fue transferido a Guangzhou Evergrande.