Primero conquistó su continente, al quedarse con la Champions de Asia. Ahora pasó al América. Y va por el mundo. Se trata del Guangzhou chino, dirigido por el brasileño Luiz Felipe Scolari, que se metió en la semifinal del Mundial de Clubes al superar a los mexicanos por 2-1 en tiempo suplementario.

Un cabezazo de Paulinho, otro brasileño, desató la locura en el Nagai Stadium. Así, el Guangzhou llenó el casillero junto al Barcelona: ambos se enfrentarán el jueves en Yokohama.

Dario Benedetto armó una jugada por derecha que derivó en el cabezazo de Oribe Peralta y el 1-0 de los mexicanos a los 10 minutos del segundo tiempo. Era la lógica, pero… Los que viajaron desde China querían hacer historia y lo empataron a falta de diez para el cierre por medio de Zheng Long, con gran ayuda del arquero Moisés Muñoz. A suplementario.

Si algo le faltaba al duelo era ir a tiempo extra. El nerviosismo y la adrenalina bien presentes. Sobre todo en Muñoz, que volvió a quedar pagando y esta vez lo madrugó Paulinho, anticipándolo luego de un córner. Locura china. Locura brasileña: porque además de ser dirigido por Felipao y tener a Paulinho, el Guangzhou cuenta con Robinho, Elkeson y Ricardo Goulart. Así, Messi y compañía ya conocen rival