Al más puro estilo del famoso escritor, novelista, cuentista, guionista, editor y periodista colombiano Gabriel García Márquez. No hay mejor ejemplo de esta creación literaria que la que vivió Sociedad Deportivo Quito en el campeonato ecuatoriano 2015. Ha perdido la categoría a falta de tres fechas y deberá pensar en cómo levantarse para el 2016.

Evaluando el primer semestre, todos nos podemos dar cuenta que el equipo de ‘La Plaza del Teatro’ NO era candidato para perder la categoría, puesto que cerró dicha fase con 29 puntos, en el quinto puesto, por encima de clubes como El nacional, River Ecuador, Mushuc Runa, Deportivo Cuenca, Aucas, Universidad Católica y Liga de Loja; superó por 10 puntos al colista.

En ese entonces, antes del arranque de la segunda etapa, todo era una ‘amenaza’, porque lo único que no se pudo ocultar fue el malestar de muchos miembros que trabajan dentro de la institución capitalina, la crisis económica. Cuando se reanudó el torneo local, la historia fue muy distinta, fue cuestión de tiempo conocer que a los ‘chullas’ ya no los estaban amenazando, sino matando lentamente.

Múltiples deudas obligaron al máximo organismo del fútbol ecuatoriano, la Federación Ecuatoriana de Fútbol, tomar riendas en el asunto y castigar a Deportivo Quito con puntos menos en la tabla de posiciones acumulada; incluso, el máximo ente del balompié, FIFA, emitió un comunicado obligando a la FEF a que la AKD pierda seis puntos.

Deportivo Quito se consagró cinco veces campeón en el fútbol ecuatoriano. Un dato curioso es que sus tres últimos títulos locales los consiguió hace menos de diez años [2008-2009(bicampeonato nacional)-2011]. Esta es la sexta ocasión en la que este club tiene que descender, no ocurría desde hace 36 años.

Varios factores pusieron a esta institución con la soga en el cuello. La redacción de Studio Fútbol había destacado hace algunas semanas que cinco motivos habrían desatado el malestar ‘chulla’ que terminó en descenso: Entrada y salida de SEK, contratar irresponsablemente, falta de control en la FEF, falta de autocontrol y juicios por deudas.

Cualquiera de los puntos anteriores pudo haber sido más letal que otro desde el punto de vista que lo vea el hincha o cualquier persona que esté al pie del fútbol ecuatoriano. Lo cierto es que sí eran temas que se podían manejar desde un inicio para no vivir una pesadilla. En fin, al saber que Deportivo Quito no iba a poder dominar estos elementos, la crónica de una muerte anunciada ya estuvo elaborada.

¿Resucitará? El alma ‘chulla’ anuncia que un grande no se va por siempre y que volverá.

Por Víctor Loor Bonilla