El Manchester City visitaba el estadio Ramón Sánchez Pizjuán para poder enfrentar al Sevilla, un partido que los de Pellegrini necesitaba ganar para no despedirse prematuramente de la Champions.
Ese mensaje lo interpretaron a la perfección los celestes ya que a los 8 minutos ya estaban arriba en el marcador con gol de Raheem Sterling.
No terminaban de celebrar la apertura del marcador cuando Fernandinho vencía a Sergio Rico y marcando en 11 minutos el 0 a 2, el Sánchez Pizjuán era un ‘cementerio’, silenciado.
El despertar del local llegaría en ese mismo primer tiempo, a los 25 minutos Tremoulinas de cabeza ponía la pelota adentro tras un gran jugada colectiva, poniendo el 1-2.
El City regresaba las cosas a como estaban, a los 36 Navas le puso un pase a Bony para que pueda marcar el 1-3 y volver a desesperanza a las gradas del Sevilla
