La polémica alrededor de la FIFA, que mantiene a varios de sus dirigentes apresados en Suiza, con Joseph Blatter en el punto de mira y una investigación del FBI todavía amenazando con sacar a la luz nuevos escándalos, vivió un nuevo capítulo al conocerse que la multinacional VISA, uno de los grandes patrocinadores del órgano futbolístico mundial, ha exigido «un cambio» en sus estructuras.

VISA, que se suma a Coca-Cola en mostrar su «descontento y preocupación» por la situación actual de la FIFA, reclama la creación de una comisión independiente que regule el organismo para frenar los casos de corrupción que se han descubierto en los últimos meses y que, al parecer, se arrastran desde hace años.

Ambas empresas, sin anunciarlo, todavía, públicamente, confían en la inmediata salida de Blatter de la presidencia, aunque el veterano dirigente suizo pretende mantenerse en el cargo hasta febrero de 2016, a pesar de que la polémica se mantiene y cada aparición de Blatter provoca un nuevo escándalo.

«Consideramos la gestión de nuestra empresa, nuestra marca y nuestros clientes, de la máxima importancia y pretendemos vincularlos con los mayores entandartes» explicó Charlie Scharf, director general del grupo y que resaltó su sospecha de que en el presente «la FIFA no cumple esas normas».

El ejecutivo de VISA se mostró «sorprendido» y «decepcionado» ante lo que consideró una «insuficiente respuesta oficial a raiz del escándalo, que demuestra que FIFA no es consciente de la importancia de los cambios que se necesitan», dando por hecha la necesidad de crear «una tercera comisión independiente» que regule el organismo.

La puesta en escena de la empresa líder en sistemas de pago se suma a la queja mostrada por Coca-Cola, que la semana pasada solicitó «profundas reformas» en la FIFA y exigió «personas imparciales para supervisar la necesaria reforma de la FIFA» para «recuperar la confianza perdida».

Tomado de: sport.es