Goodinson Park fue el testigo de uno de los mejores partidos que se han jugado este año; el Everton recibía la visita del Chelsea en un partido con mucha actividad.

Los locales a los 3 minutos ya estaban abajo en el marcador por 0 a 2 con goles de Costa e Ivanovic, las cosas no se veían bien para ellos y ya se esperaba lo peor ellos.

Los de Mourinho no quitaron el pie del acelerador en ningún momento, sin embargo los loclaes ‘levantaron’ y nivelaron el juego y a los 45 descontaron en los pies de Mirallas.

Coleman anotaba un autogol a los 63 y se ponían las cosas por 1 a 3, dos minutos después, a los 69 Naysmith anotaba el 2 a 3.

En pocos minutos vendrían los goles que definirían el partido, Matic a los 74 marcaba el 2-4, a los 76 Eto’o ponía el 3-4 y ni bien se ilusionaban los del Everton, Ramires a los 77 ponía el 3-5.

Sobre el final, a los 89, Diego Costa ponía el 3-6, PARTIDAZO