Uno es líder invicto, el otro buscando volver a la palestra. Uno tiene muchas certezas y el otro muchas preguntas. A uno le sobran goles, el otro los necesita. Lo único en común que tienen ahora los del Astillero es que están en un torneo internacional y ganaron en la última fecha de la Copa Pilsener.
La campaña que ha llevado el Emelec en el inicio de este torneo ha sido con nota perfecta, 18 puntos logrados en seis fechas que alimentan su esperanza de ser protagonistas y lograr la ansiada gloria que les ha sido esquiva en los últimos años. Lo que acabo de mencionar es el motor que mueve al equipo de Quinteros. Jugadores con sed de revancha que desean y están enfocados hacia ese objetivo.
Con un proceso en marcha y un DT consolidado los eléctricos desde ya dependen de si mismos para ganar esta etapa ya que hasta ahora no se avizora en la tabla algún rival de temer, es el equipo más compacto y hasta ahora no ha dejado rastros de flaqueza en el rendimiento integral del equipo.
A pesar de que tiene ciertas limitantes individuales le ha bastado para dominar las primeras fechas y obteniendo resultados complicados como una victoria en Casa Blanca.
En la vereda de enfrente una victoria que obtuvo el domingo ha sido un bálsamo para curar los estragos que ha generado un inicio de temporada convulso para Barcelona SC, ante el Macará fue la primera victoria en nueve partidos tras un rendimiento irregular donde estuvo cerca de resultados espectaculares pero a la final quedaron en nada además de caídas estrepitosas.
Desconcentraciones defensivas, la ‘resaca’ del titulo obtenido el año pasado, la evidente falta de forma física de algunos de sus elementos han abonado a este momento amarillo en donde debe retomar el rumbo lo más rápido posible si quiere ser protagonista desde esta etapa del torneo ya que se le ha puesto cuesta arriba al igual que la Copa en donde tendrá que refrendar de local los buenos desempeños que tuvo de visitante y arañar puntos en la Bombonera a un flojo Boca.
Otro de los factores del bajo momento de BSC es la falta de ideas en el medio sector lo que hace que el equipo sea inconexo en sus líneas y eso repercute en el numero de goles anotados, Nahuelpán luce como llanero solitario en ciertas ocasiones (lleva 3 goles) y los niveles que han mostrados los que ocupan el sector de la zaga no fueron como se los esperaba.
Al DT Gustavo Costas se le acorta el tiempo para tomar los correctivos para volver a la senda del triunfo y hacer despegar a un equipo que apunta alto, se ha tropezado además de los rivales que lo han enfrentado sus propios fallos. El primer paso para la recuperación ya está hecho lograron su primer partido ganado en el año y querrán seguir por ese rumbo.
En el Astillero, dos realidades diferentes pero en el fútbol no está dicha la última palabra.
Juan José Palacios
@jjpalaciosc
